Refiriéndose a Las puertas de la noche y Si Cristo te desnuda.
Tus novelas son de una factura excelente. Me gustan, me obligan a preguntarme cosas sobre la realidad cubana. Y lo mejor: además de eso, no las puedes dejar de leer, una vez que empiezas.
Daniel Chavarría, escritor cubano
Los sentidos ocultos de la cubanidad, las claves más secretas de la vida subterránea cubana, esa síncopa latina tipificadora de una marginalidad distinta a la europea, y más allá de eso, el develamiento de una ciudad que muchos (y por razones diversas) intentan ocultar al mundo, son los valores innegables que destacan al joven escritor Amir Valle de sus coterráneos. Su mirada desprejuiciada no rinde cuentas a ningún esquema ni dogma político o social, y sólo pretende adentrarse, como un dardo, mucho más dentro que la piel de una sociedad compleja – y en ello radica su hermosura. Mucho habrá que decir sobre este narrador que abrasa su realidad con su prosa irreverente, como quien busca descubrir hasta el olor posible de la ceniza del mundo que narra, si sucediera ese incendio del cual brotarán sus personajes, más que como fantasmas de muertos sin nombre, como Aves Fénix que defenderán las leyes clandestinas que le insuflan la poca vida que padecen.
En: «Gritos de la Novela Negra Latinoamericana: un bojeo escudriñador». Boletín De Negra Estampa. No 4. Universidad de La Laguna, 2001.
Manuel Vázquez Montalbán
Acabo de terminar de leer Las puertas de la noche y tengo la sensación de haber hecho un viaje a ciertas sorprendentes penumbras de la Isla. Me conmovió la historia y me sorprendió especialmente el buen entramado del relato.
Alejandra Costamagna, escritora chilena
… había comenzado a leer Las puertas de la noche. La terminé de leer casi de inmediato. Me ha parecido una novela impecable. Para los que apenas conocemos La Habana nos ofrece una visión distinta, el negativo de otra realidad. Pero en cualquier caso y lo que importa es el hecho literario, que trasciende fronteras y nos habla del lado oscuro del hombre, sea en la ciudad, en el país o en el tiempo que sea. Y eso creo que lo has conseguido.
Antonio Soler, escritor español
Ya me leí las aventuras del policía Alain, que me mostraron una cara de tu país que no conocía y ni tan siquiera me imaginaba, pero quiero leer más cosas tuyas. Pero además de esa otra Cuba, lo que importa es el oficio que muestras, la solidez de un estilo que ya es maduro. Es grande esa novela.
Eduardo Antonio Parra, escritor mexicano
Terminé de leer Las puertas de la Noche de una sentada y, como te adelanté, definitivamente me ha gustado mucho más que la segunda entrega. Mi impresión es que más que una novela negra al uso, entra de lleno en un estilo costumbrista, con un lenguaje menos decimonónico claro está, en el que las descripciones de los paisajes urbanos y humanos se mezclan con las entrañas de los protagonistas, es decir, sus sentimientos más descarnados y los comportamientos más superficiales e irracionales a un tiempo. Me parecen geniales los monólogos de algunos de sus personajes, estilo que deja en manos casi exclusivamente de Tomate en Si Cristo te Desnuda, en ellos no te da respiro en un torbellino de frases que tienen la intención de que centres la atención a pesar de la no existencia de puntos y aparte (me encanta). En fin, no es por «darte coba«, pero es un buen libro.
Jesús Lens Espinosa, escritor español
Me gusta mucho esa novela y me parece muy interesante el diálogo con Padura, ya que la época de Mario Conde es distinta de la de tu Alain, aunque sean separadas por menos de diez años. Las realidades sociales que ahora están por «desmistificar» son otras, y me gusta mucho como las va revelando tu novela. Además está muy bien escrita.
Esther Whitfield, crítica y profesora universitaria norteamericana
… me gustó mucho. Manejas muy bien el realismo sucio con matices de crítica social sin caer en extremos, como el panfleto o la nota roja.
Agustín Labrada, poeta y periodista cubano
… una expansión mayor en esa fabulación, esa ambientación casi cinematográfica y esa precisión del lenguaje (ora sostenido por las riendas, ora despeñado como una catarata) está presentes en sus novelas Si Cristo te desnuda y Las puertas de la noche. Estamos en presencia de un narrador que conoce las armas del oficio, tiene un mundo propio que contar (el de su país y su tiempo) y sabe hacerlo con esa maestría que nos hace disfrutar sus historias como si la viviéramos.
Revista Literarte No. 2 1999. Argentina.
Pedro Rodrigo, periodista y escritor argentino
Sobre Si Cristo te desnuda.
Lo último de Amir Valle aparecido en España es una novela negra en toda regla. Una turbia historia que se adentra en los sumideros de la prostitución homosexual de La Habana, un mundo sórdido y putrefacto que representa la otra cara de la moneda del famoso turismo sexual y folclórico de ron y mulatas. Valle no hace artificiosa «habanería» verbal y utiliza los modismos justos. Su estilo es sólido y escueto, encajado con el procedimiento policiaco, un tanto irregular que lleva a cabo el teniente de la policía criminal Alain Bec, protagonista del relato, para vengar la muerte de la hija de un amigo, asesinada junto a su novio (Cristo), un macarra chantajista bisexual.
ABC Cultural, 6 de julio del 2002.
Fernando Martínez Lainez, en: «Desde Cuba, rompiendo tópicos».
Lo curioso y sorprendente es de qué modo has ido construyendo el relato. Los avances detectivescos de la narración van anunciándose con esos títulos evangélicos de cada capítulo. Símbolos con perversas alegorías que tu ingeniosa escritura y honda percepción existencial han manejado con eficacia y extraña belleza. El fluido discurso de esta obra presenta, sin duda, variantes muy acertadas. Me entusiasma la arquitectura policíaca: los detalles en tal sentido (sin olvidarte de los conocidos antecedentes detectivescos) los has manejado con gran habilidad y certeza.
Editora Revista Francachela, Buenos Aires, 24 de julio del 2001.
Norma Martin, escritora argentina y profesora de la UCA